¿Le ha parecido llamativo el título? ¿Quizás un poquito provocativo? De eso se trata: de buscar títulos llamativos. No se quede con el primer título clásico que se le ocurra para su obra. Intente que llame la atención, que suene especial. Siempre acorde al tema que va a tratar, pero intentando atraer la atención, sin ser exagerado, y sin necesidad de complicarlo demasiado. Y, por cierto, ¿cómo se podría traducir este texto al inglés para que funcione en el mundo anglosajón? No es tan sencillo. Quizás lo que funciona para un mercado no lo haga para otro. Las culturas cambian. La respuesta emocional a los títulos también. Y al contenido, por supuesto. ¿Cómo tratar todo eso? Vamos a verlo a continuación, en esta entrada sobre traducciones y las complejidades que conllevan.
Ya hemos hablado de cómo estructurar un libro, de cómo montarlo, de cómo promocionarlo, y de cómo hacernos famosos y hasta guapos, hasta el punto de que nuestras decisiones importantes y críticas en la vida pasen por elegir el color del Ferrari, o si comer en Roma o cenar en San Francisco, o si el jet privado debe ser de dos motores o de tres. Decisiones importantes de todo escritor, especialmente de los de ciencia ficción. Bueno, quizás esté exagerando un poco. Pero ahora vamos a asaltar el mercado anglosajón. Pónganse los cinturones, porque el mundo va a cambiar en un instante.

Debe estar conectado para enviar un comentario.