Decir adiós es un camino de aprendizaje

Hoy no es miércoles musical, pero no importa; si algo he aprendido en la vida, es a romper las reglas. Sobre todo las que uno se impone a sí mismo. Y hoy traigo a Cecilia, que nos enseñará a decir adiós con paz, y sin miedo.

Siempre es un buen momento para decir adiós. Es fácil sonreír en el encuentro, en la dicha, en la felicidad. Pero el alma se templa como el acero al rojo cuando hemos de decir adiós. Cuando hemos de dejar a aquel ser que tanto amamos, y que tanto nos amó. Las razones son muy diversas, pero llega un momento en el que decir adiós es lo único que queda de un amor que se tornaba eterno hasta el difícil final.

cecilia
Cecilia

Es entonces cuando miramos adelante, y solo vemos un camino de soledad, frío, oscuro, lleno de heridas y de dolor muchas veces; pero es nuestro camino. Es nuestra senda. Es nuestro futuro. Y, solo por eso, merece la pena dar el primer paso sin esa antigua mano amiga, y comenzar a atravesar ese sendero de dolor y sufrimiento, que nos lleva a un nuevo puerto.

Un puerto de paz, de felicidad, mientras atravesamos una marea de olas y recuerdos que nos mecen violentamente, con aquellos pensamientos, aquellos sonidos, aquellas risas, aquellas promesas que nos hicimos, y que quedaron en una esquina, llenándose de polvo, mientras las almas que eran gemelas se alejan por caminos antagónicos, hasta perderse para siempre en el silencio.

Ese es el mensaje de «Decir adiós», la canción que hoy he querido traer a este perdido blog de Internet. Un tema con una letra profunda, amarga, pero serena y firme en sus palabras. Una interpretación maravillosa de Cecilia, una cantante que perdimos en un desgraciado accidente de automóvil, pero que nos dejó un legado de canciones que han marcado una época en la historia de la música ligera.

Son muchos los días donde nos levantamos sin saber por qué nos fuimos a dormir. En esos días, debemos abrir las ventanas de la casa, y de la esperanza, respirar profundamente, y comprender que un nuevo día en la vida es siempre una nueva oportunidad de salir adelante. De progresar, de prosperar, no en lo material ni en la cantidad, sino en la calidad humana de nuestras almas. Porque llega un momento en la vida de cualquier ser humano en la que ya no importa nada, sino seguir adelante, sonreír una vez más, y encontrar una razón para vivir, para disfrutar, para cantar.

Ya que, no lo olvidemos,  no se trata de que la vida deba o no tener sentido; la vida será lo que nosotros queramos que sea. Si queremos que sea un pozo hondo y eterno de desesperación, eso será. Si queremos que sea un lugar para caminar buscando nuestros sueños, nuestro futuro, nuestra libertad, eso será.

La mano y la sonrisa de aquel ser maravilloso se fueron para siempre,  y nunca volverán. Pero no por haber perdido la luz de una estrella debemos desesperar; existen otras estrellas, que debemos buscar, que debemos encontrar, y cuya luz nos dará refugio. Nos dará paz. No será su luz aquella que dejamos. Pero será luz, y será un faro en el camino.

Solo por eso, haber recorrido ese camino oscuro y árido habrá merecido la pena. Solo por eso, habrá merecido la pena luchar.

Con ustedes, Cecilia interpreta «Decir adiós».

Autor: Fenrir

Amateur writer, I like aviation, movies, beer, and a good talk about anything that concerns the human being. Current status: Deceased.

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