Cuando la realidad supera a la ciencia ficción

Suele decirse, por parte del algunos lectores que no han leído ciencia ficción, que este género trata de naves espaciales, rayos poderosos, planetas que explotan, y héroes guapos con tecnologías muy modernas que rescatan a atractivas chicas jóvenes y desvalidas, que curiosamente casi siempre van en ropa interior.

Afortunadamente, aunque pueda haber un subgénero en la ciencia ficción con esa temática, lo cierto es que algunas de las más grandes obras que ha dado la literatura, y el cine, son del género de ciencia ficción. Pongo un ejemplo muy rápido: 2001. Pongo otro: Solaris. Pongo una saga: la trilogía de La Fundación de Asimov. Entre muchísimas otras.

Desde Julio Verne, pasando por Isaac Asimov, Arthur C. Clarke, y muchos otros, la ciencia ficción es un camino de exploración del pasado, presente, y futuro de la humanidad. Esa exploración del ser humano, y de las sociedades humanas, se traslada a mundos y civilizaciones imaginarios, donde se resumen los conflictos del ser humano, se analizan, y se proyectan. Son muchos los libros de ciencia ficción, y también el cine, que nos han traído un futuro que luego se ha hecho presente.

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Terra Prime, organización racista y xenófoba, con un mensaje calcado al de Donald Trump

Estaba revisitando ayer un capítulo de la serie «Star Trek: Enterprise», la penúltima de la saga, y concretamente un episodio doble de la cuarta temporada, del año 2005, formado por «Demons» y «Terra prime». Ambientado en el siglo XXII, cuando la humanidad ha entrado en contacto con otras civilizaciones, un hombre, John Paxton, y sus seguidores, quieren que la humanidad sea para los seres humanos, y quieren expulsar a otras civilizaciones, que contaminan la Tierra con sus culturas, sus lenguas, y sus costumbres. «La Tierra, para los humanos».

De hecho, su organización se llama «Terra Prime», que en latín significa «La Tierra primero». ¿Le suena? Exacto. Les recuerda a «America first», es decir, «América primero». Es exactamente la misma idea de cierto hombrecillo ignorante y con ganas de creerse el nuevo Líder Mundial de la Tierra. Ese hombre es Donald Trump, ese iluminado engreído misógino con aires de supremacista, megalómano y convencido de que todo se resuelve al estilo John Wayne: a tiro limpio. Que no respeta culturas, ni lenguas, ni ideas, ni nada que no sea su pequeño y absurdo mundo primitivo y retrógrado.

Tenemos pues: «America first» y «Terra Prime». Son exactamente el mismo concepto, pero Star Trek ya nos lo advirtió mucho tiempo atrás. Como tantas veces, la ciencia ficción nos da un toque, una señal, un aviso: «cuidado: esto es algo que se está gestando: atajarlo antes de que suceda». Quizás otro ejemplo de aviso de la locura de Donald Trump sería la maravillosa «Starship Troopers», esa película de Paul Verhoeven, que con un tono y un humor ácido y sarcástico, nos pronosticaba, con grandísimo acierto, la América que ahora vemos en Donald Trump.

De eso trata la ciencia ficción: de adelantarse al futuro. Esos dos capítulos de Star Trek son una muestra brillante y fantástica de cómo la ciencia ficción nos provee de señales de alarma para un futuro que no debería llegar, pero que suele hacerlo en demasiadas ocasiones. La buena ciencia ficción no trata de armas futuristas, naves espaciales, o tecnologías sofisticadas. Eso está en un segundo plano. La buena ciencia ficción trata del ser humano, de su naturaleza, de sus miedos y logros, desde un punto de vista especulativo y de futuro.

Veamos el lema del personaje de John Paxton en esos capítulos. En un momento dado dice:

Paxton
John Paxton, personaje de Star Trek: Enterprise genialmente interpretado por Peter Weller

«Estoy devolviendo la Tierra a sus legítimos dueños. Estoy devolviendo la Tierra a la humanidad, a los seres humanos. Es el trabajo de mi vida, es para lo que nací, y no hay nadie -ni un extraterrestre, ni un humano- que me impida lograrlo».

John Frederick Paxton.

Ahora vamos a ver lo que dice Donald Trump:

«Nuestros políticos son estúpidos. Y el gobierno mexicano es mucho más inteligente, mucho más agudo, mucho más astuto. Y envían a los malos porque no quieren pagar por ellos. No quieren ocuparse de ellos. ¿Por qué deberían hacerlo cuando los estúpidos líderes de los Estados Unidos lo harán por ellos?»

Donald Trump.

¿Lo ve? El mensaje es esencialmente el mismo. A Estados Unidos van los mexicanos «malos» que no quiere el gobierno mexicano, y contaminan a los estadounidenses «buenos». Luego, hay que evitar que Estados Unidos se contamine.

El concepto final es ese: «contaminación». Los extraterrestres vienen a contaminar en Star Trek. Y los mexicanos vienen a contaminar, en el mundo racista de Donald Trump. Rechazar a otros simplemente porque no son uno. Rechazar todo lo que sea distinto. Esa es la simiente del odio a todo lo que es diferente, que invade actualmente el mundo de nuevo.

Este es un ejemplo, podría poner muchísimos más, y solo tratando Star Trek. Si me extiendo a otras novelas y películas la lista de predicciones futuras es inagotable. Por ejemplo, el «1984» de George Orwell, que ya se ha hecho realidad en China, con el control de la población con millones de cámaras.

Visto lo visto, se hace evidente que la ciencia ficción es mucho más que chicos y chicas guapísimos y durísimos enfundados en trajes plateados. La ciencia ficción es una mano extendida a los mejores y peores elementos de las sociedades humanas, y un género de la misma importancia que cualquier otro género.

Cada cual tendrá sus gustos, por supuesto. Pero, sin duda, ese género denostado y olvidado ha dicho, dice, y dirá, cuáles son los caminos de la humanidad. No acertará siempre claro. Pero sí nos enseñará, al menos, por dónde no debemos caminar. Y eso es ya un logro que difícilmente se podrá superar.


Información sobre Terra Prime en este enlace.

Autor: Fenrir

Amateur writer, I like aviation, movies, beer, and a good talk about anything that concerns the human being. Current status: Deceased.

2 opiniones en “Cuando la realidad supera a la ciencia ficción”

  1. Toda la razón del mundo. A veces el mundo de la ciencia ficción simplemente se avanza a los tiempos (y no es habitual que sea para las cosas buenas… ejem). ¿Será que al final en la ciencia ficción se plasman los miedos y estos se acaban reproduciendo?

    HemosVisto!

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    1. Es probable que la ciencia ficción sea en muchos aspectos una proyección al futuro de nuestros miedos. Y efectivamente quien teme algo verá muchas veces cómo ese algo se hace real. Quizás un cambio de pensamiento sería el primer paso. Muchas gracias y un abrazo.

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Comentarios cerrados.

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