Yentl, la voz que busca la verdad

Es fácil saber qué queríamos decirles a nuestros padres, cuando estos ya no están entre nosotros. Pero es muy difícil entender que la vida ha de darnos un golpe severo, duro y frío para que comprendamos esta gran verdad, cuando es ya demasiado tarde.

Y es que la vida se compone de fases, que pasan irremisiblemente de generación en generación. Desde el inicial «mi padre no se entera de nada» pasando por «mi viejo no me comprende«, o terminando con «son otros tiempos, está desfasado«.

Sin comprender que esos tiempos son siempre los mismos, y la experiencia de nuestros padres, en los aspectos clave de la vida, son vitales para entender que se basan en experiencias que se han vivido, una y otra vez, desde que la humanidad apareció en la Tierra, hace incontables siglos.

De eso trata la pieza musical que traigo hoy. Se trata de la cantante norteamericana Barbra Streisand, en un tema que interpreta en la película «Yentl» (1983), un drama musical, donde el personaje de Streisand se ve enfrentada a la realidad de no poder estudiar por ser mujer. Y decide disfrazarse de hombre para poder entrar a estudiar, y hacer sus sueños realidad.

Es una película emotiva, divertida en ocasiones, compleja en otras, que no pretende dar lecciones, pero sí mostrar la dureza de la vida de un ser humano por el simple hecho de haber nacido mujer.

En esta pieza musical el personaje de Streisand ha visto fallecer a su padre, ha marchado de casa, y le han robado todo el equipaje. Está sola en el bosque, a la luz de una vela, intentando entender todo lo que le ha pasado, desde que su padre le enseñara, en secreto, libros que solo podían ser leídos por hombres, y que encendieron en ella la chispa del conocimiento y el saber.

Hay muchos elementos que discutir en esta película: el de la mujer, el de la religión, el del conocimiento, y de cómo hemos construido, a lo largo de la historia, sociedades que no entienden que dejar a las mujeres de lado es perder el 51% del potencial de un país. Por no hablar de la irresponsabilidad de tal acción, y el enorme perjuicio que supone para millones de brillantes mujeres.

Sin duda, Barbra Streisand nos muestra en esta pieza su portentosa voz, y su casi infinita capacidad armónica. No en vano es sin duda una de las voces del siglo XX.

Una película que no gustará a todo el mundo, por su contenido romántico, religioso, y por ser un musical. Pero si a mí me llenó, que soy más frío que Terminator, quizás le pase lo mismo a usted.

Para ver en navidad, o en cualquier época. Les dejo con esta pieza, que personalmente creo magistral.