Mi predicción sobre el Proyecto Artemis

Hace unos días una agencia de publicidad me mandó un correo para que lo contestara, porque querían tener respuestas de respetados «influencers». Yo sonreí, y por supuesto no contesté. Evidentemente, ni yo soy un influencer, ni la agencia que me mandó el correo piensa que lo sea; lo que quiere es obtener información de mí para luego venderme sus maravillosos productos y negocios.

Pero que yo sea un don nadie no significa que no sea capaz de reflexionar, y de argumentar, y de razonar. Es más, me atrevería a decir que incluso podría llegar a superar a algún que otro influencer. Quizás, no lo voy a asegurar. Pero entra dentro de mis posibilidades.

Lo cierto es que mi opinión de no influencer sobre el viaje a la Luna para 2024 por parte de la NASA sigue su curso, en una nueva reflexión que traigo hoy a este pequeño pero coquetón blog de ciencias y humanidades.

Ellos, la NASA, siguen diciendo que irán a la Luna para 2024, llevando seres humanos, gracias al proyecto Artemis, y yo sigo diciendo que tardarán, como mínimo, dos años más, lo cual nos coloca al menos en 2026, aunque fácilmente podríamos irnos a 2027 o 2028.

Yo tengo una ventaja, sin embargo, al pronosticar la fecha: no estoy influenciado por las presiones de la Casa Blanca, y del señor Donald Trump, y por su política de apretar a todos para que digan exactamente lo que Trump quiere oír: que la Casa Blanca es maravillosa, y que les da todo el dinero necesario, y un presupuesto holgado para ir a la Luna.

Lo cierto es que, según lo veo, y esta es mi predicción, toda esa fanfarria sobre 2024 que anuncia la NASA, y que cada vez suena más a publirreportaje de la Casa Blanca, se caerá en pedazos tan pronto como terminen las elecciones. Vamos a verlo.

Lunar Gateway, la pieza perdida de la NASA y que nadie encuentra.

El administrador de la NASA dice que tienen un presupuesto holgado para ir a la Luna. Seamos serios, por favor: la NASA no ha tenido un presupuesto holgado para nada excepto durante la carrera espacial de los años sesenta, y solo por una cuestión de prestigio político.

Cuando se terminó la apuesta con la Unión Soviética, el presupuesto desapareció. Desde entonces la NASA va mendigando dinero para sus proyectos, y haciendo lo que puede con el poco dinero que recibe. De hecho la NASA no ha recibido ni una décima parte del presupuesto prometido por Trump desde que fue elegido presidente. Los datos están ahí.

Pero hay que contentar «al jefe». Y por eso hay que decir que todo va viento en popa, que todo marcha fenomenal, y que Estados Unidos, la gran nación conquistadora del universo, llevará a seres humanos a la Luna para 2024.

Yo no soy persona que guste de hacer predicciones, no soy de los que le gusta predecir el futuro. Pero hoy voy a hacer una excepción. Y voy a predecir no una, sino dos cosas sobre lo que ocurrirá tras las elecciones de Estados Unidos de 2020:

La primera: Donald Trump podría perder las elecciones. Está complicado, lo sé. Está poniendo muchas trabas, y está avergonzando al mundo con sus declaraciones de que no aceptará la derrota, además de declarar que si no gana será por una manipulación. ¿Se imaginan que eso lo dijera Joe Biden, el líder demócrata? Lo habrían crucificado ya. Pero, como lo dice Trump, no pasa nada.

La segunda predicción: en cuanto terminen las elecciones, sea quien sea el ganador, la NASA anunciará un retraso en el proyecto Artemis, que es el nombre que recibe la misión para volver a la Luna.

¿Volver para 2024? La NASA no ha probado el cohete SLS, ni la cápsula Artemis tripulada, ni el módulo de descenso, ni la estación lunar que ha de gestionar los vuelos… ¿Sigo?

¿Por qué me arriesgo a decir esto? Es muy sencillo: el vídeo que adjunto abajo, recién publicado por la NASA, habla en su primera parte del proyecto Artemis, y aparece el responsable de la NASA diciendo que les sobra el dinero para llevar a Estados Unidos al espacio profundo. Más o menos que tienen al capitán Kirk y a la nave Enterprise casi lista. Pero, ¿qué falta en esa previsión de la NASA? ¿Alguien lo sabe? Es un detalle de nada…

Dejando aparte otros elementos, efectivamente falta una pieza absolutamente fundamental: la estación espacial lunar «Lunar Gateway«, que se podría traducir como «Puerta de acceso» (que nadie se emocione, no es la puerta estelar de Stargate).

La estación lunar Gateway está pensada para ser lanzada en 2022, fecha en la que tiene que estar a punto si se ha de colocar en órbita lunar. Su misión es que la cápsula se acople a la estación lunar, y de ahí bajen a la superficie de la Luna.

Ni qué decir tiene que no ha habido ni un solo lanzamiento de la Gateway, que continúa en su fase de diseño. Eso por un lado. Por otro lado, la Gateway supone probar tecnologías nuevas, y colocar la nave en una órbita específica, que nunca ha sido ensayada antes. Ello conlleva años de pruebas, una vez esté terminada claro. Porque, de momento, solo hay maquetas de prototipos.

Tampoco se ha probado el módulo de descenso, la famosa «araña», donde los astronautas bajan. Solo hay prototipos básicos, diseños generales… Muy lejos de tener algo que pueda, no ya alunizar, sino, simplemente, empezar a ser testeado.

Todo este tema de Artemis cada vez más suena a propaganda política de la Casa Blanca. Porque es lo que es. La NASA recibe una orden:

«Decid a la opinión pública que en la NASA estáis hasta las orejas de dinero, y que vamos a ir a la Luna, a Marte, y al mismísimo fin del universo si hace falta. Aplaudirán y nos votarán como locos. Luego, si acaso, ya les decimos la verdad, por aquello de que ya esto no lo tapa nadie«.

Para terminar, creo que el proyecto Artemis lleva un retraso considerable, creo que su presupuesto es una ínfima parte del necesario, no se espera un primer vuelo no tripulado hasta el año 2021, si eso es posible, no se tiene constancia clara de cómo se procederá con la estación Gateway, no se ha probado el cohete SLS nunca, no se sabe cuándo estará acabado y qué problemas presentará, no hay noticias del módulo lunar y de la estación espacial lunar, y no hay tiempo físico para poner todas esas tecnologías a punto para 2024.

El módulo lunar también es un concepto de momento.

Todo esto me recuerda, en cierto modo, a las prisas que había con los transbordadores para demostrar que eran eficaces, cuando en realidad tenían unos enormes sobrecostes y puesta a punto que se dilataba en el tiempo mucho más de lo que se esperaba de aquel diseño. Y se empezaron a hacer concesiones de todo tipo para ahorrar costes, y sobre todo tiempo, como ya comenté recientemente con el tema del transbordador Challenger.

En conclusión, sí creo que se irá a la Luna, pero yo predigo que será para 2026, o mejor, 2027 o 2028. Algunos dicen que, para 2024 se podría ir si todo saliese excepcionalmente bien. Yo digo que si sale todo excepcionalmente bien no se podrá ir antes de 2026.

¿Estoy equivocado? Es posible. Pero, como no soy influencer, no me coserán a críticas en Twitter. Y seguiré viendo el próximo capítulo de Star Trek cuando termine este texto, con la tranquilidad de no ser molestado.

¿Ser influencer? No gracias, prefiero ser incogniter, y poder hablar sin el ruido de las redes. Lo cual no significa que no atienda críticas. Lo haré encantado. Pero como «humaner», si no les importa. Muchas gracias.

Les dejo con el vídeo y las declaraciones del administrador de la NASA diciendo lo encantados que están con el presupuesto que la Casa Blanca les ha dado. Lo siento señor administrador: simplemente soy demasiado viejo para creerme esa retórica vacía. Traiga pruebas, y entonces hablaremos.

Autor: Fenrir

Amateur writer, I like aviation, movies, beer, and a good talk about anything that concerns the human being. Current status: Deceased.

Un comentario en “Mi predicción sobre el Proyecto Artemis”

Comentarios cerrados.

A %d blogueros les gusta esto: